Nutrición emocional: ¿Estoy comiendo por hambre o por emoción?
Nutrición emocional: ¿Estoy comiendo por hambre o por emoción? A veces comemos sin hambre. No porque tengamos necesidad física de alimento, sino porque estamos aburridos, ansiosos o buscamos consuelo. Y déjame decirte algo: no hay nada “malo” contigo. Es tu cuerpo intentando gestionar emociones. La buena noticia es que hay otra manera: aprender a identificar qué necesitas realmente y liberarte de la culpa alrededor de la comida. Estrategias simples para empezar Escucha a tu cuerpo: haz una pausa antes de comer y pregúntate si se trata de hambre física o emocional. Quita las prohibiciones: ningún alimento debería ser “malo”. Cuando todo está permitido, la ansiedad por comer disminuye. Cuida tus emociones sin comida: a veces lo que necesitas no está en la nevera; puede ser descanso, movimiento, una charla con alguien o simplemente un respiro. Tip rápido de nutri de confianza: la próxima vez que sientas un antojo fuerte, toma un vaso de agua, respira profundo y pregúntate: “¿Qué estoy necesitando de verdad?” Ver más artículos ¿Querés empezar a comer mejor? Agenda tu espacio de consulta conmigo hoy mismo Agenda tu cita
Nutrición emocional: ¿Estoy comiendo por hambre o por emoción? Leer más »